Ayer terminó la segunda sesión de la asignatura de Habilidades Counselling. Este año la principal diferencia es que cada sesión dura tres horas, en vez de las escasas hora y media de las últimas cuatro ediciones. Espero que este marco temporal más intensivo nos permita profundizar y aprovechar más el tiempo. La verdad es que esto del tiempo es un poco ilusorio. Ayer estaba contando las sesiones que teníamos a nuestra disposición, con la de ayer cinco. Es decir, nos quedan cuatro sesiones. Muchos profesores creo que se agobiarían con esto. ¿Cómo impartir todo el temario de esta asignatura en cinco sesiones? Es una pregunta habitual. Equivocada, pero usual. En mi caso, esta situación me recuerda una anécdota que leí de Richard Bandler, al comienzo de su libro "la magia en acción" (aunque su trabajo tenga poco que ver con la magia ,)
Le propusieron a Bandler hacer unos vídeos donde demostrar su pericia como terapeuta breve. Al entrar en la sala de grabación, el técnico de vídeo se le acerca y le comenta, un tanto desafiante que hay un problema. Las cintas que tienen a su disposición duran sólo 30 minutos, por lo que la sesión sólo puede durar 30 minutos. Bandler, se le queda mirando y le responde que ciertamente es un problema, pero para el técnico, porque le pregunta que qué va a hacer con todo el tiempo de la cinta que sobre.
Es una anécdota que siempre me ha hecho gracia. Como muchas de las anécdotas de Bandler, siempre hay un reencuadre un tanto desafiante al final. Y la verdad es que se puede aplicar en cierta manera a nuestra situación. ¿Cómo vamos a aprovechar estas cinco sesiones, cuatro ya, para sacar el máximo partido y aprender todo lo que podamos acerca de los procesos de counselling? Tenemos 12 horas a nuestra disposición y estoy seguro que se puede hacer mucho con ello. Doce horas para desarrollar ciertas habilidades en esto que denominamos counselling, es muy diferente como encuadre a cómo meter mucha cantidad de algo en un espacio limitado.
Quitando la primera sesión,fundamental a la hora de establecer un primer contacto para conocernos, empezar a construir una relación con el grupo y con cada alumno/a individualmente y sobre todo para generar expectativas congruentes con el propósito del curso, ayer ante todo nos centramos en dos cuestiones. La primera era introducir un modelo básico general que subyacerá a gran parte de nuestro trabajo: el modelo de autogestión, siguiendo el trabajo genial de John McWhirter. La segunda empezar a esclarecer qué significa conceptualmente explorar o indagar con alguien.
Ayer una compañera que está asistiendo a las sesiones, mientras los alumnos estaban realizando un ejercicio, se me acercó y me preguntó algo así como "¿cuándo o cómo trabajarías más conceptualmente en esta asignatura?". Reconozco que la pregunta/comentario me descolocó. Porque tal y como la entendí y entiendo, presuponía dos cosas ante todo: 1) que no estaba trabajando conceptos en la sesión, 2) la noción de concepto que "tenía en mente" mi compañera implicaba ante todo proporcionar información abstracta (algo muy alejado de mi idea de lo que es un concepto).
El concepto fundamental que trabajamos ayer fue éste de indagar o explorar con alguien. Mi idea de concepto es que es una estructura que necesariamente debe estar vinculada o basada en la experiencia personal, sobre todo si es una "experiencia de uso". Para muchos un concepto se acerca más a una definición tipo diccionario o enciclopedia. Para mi una definición está muy lejos de un concepto, puede ser parte de ello, pero hay mucho más. El concepto incluye experiencia, y como tal, en parte será inefable: imposible de describir meramente con palabras. Por eso gran parte de esta asignatura (y muchas otras que imparto) se basa en explorar experiencialmente aspectos de un concepto, vivirlos, corporeizarlos en diferentes situaciones, generando también situaciones donde pensar sobre ello, leer sobre ello, hablar sobre ello y escribir sobre ello (siendo lo fundalmental "el ello" claro). En otras palabras lo importante será lo que hagamos, no tanto lo que se hable o se diga o se piense acerca de lo que se hace (que es importante, pero la clave sigue siendo lo que se hace en sí).
Por eso, hay dos grandes momentos en clase: uno los ejercicios para experimentar, hacer, practicar. Dos los momentos donde compartir las experiencias, discutirlas, elaborarlas, conectar con otras cuestiones.
Por ejemplo ayer hubo un buen momento cuando me di cuenta que una concepción de algunos alumnos sobre esto de indagar o reflexionar con alguien, tenía que ver con "pasar un cuestionario de preguntas", como si de un checklist se tratara y también la idea de "sacar información a alguien".
Esto de "sacar información" dio bastante de sí, creo. Lo que más me inquietó e hizo gracia a partes iguales de la expresión, es que una vez más presupone o asume (tanto da ahora la diferencia entre ambos procesos, aunque es una asunción probablemente) que uno es activo (el que saca la información) y uno pasivo (se le saca la información). También y a partir de lo anterior, y esto es más limitador en potencia, que la información ya está ahí de entrada (y sólo hay que sacarla) y que además el responsable de sacar la información es el que indaga. La relación que se establece entre indagador/explorador y sujeto explorado es un poco asimétrica, desde esta perspectiva.
Imagino que se pasa por algo la importancia de la preposición "con". Indagar con alguien implica coconstruir un sentido, un significado entre ambos. No obtener respuestas a preguntas, sino elaborar/construir una comprensión sobre cierto asunto. Y hacerlo entre ambos, o entre las personas implicadas en ello.
Aprovecho para agradecer aquí a Paula que expresó con mucha claridad esta cuestión, que imagino compartirían más de uno. Con esto, vamos a ir construyendo entre todos una noción de indagación exploratoria, de investigación en cierta manera a lo largo de estas sesiones. Y la manera de aprenderlo fue mediante un proceso que en sí era un ejemplo de indagar.
Esto era para mi justamente una clase muy conceptual. En el sentido de generar las bases para ir construyendo esa estructura emergente, diferencial que es un concepto. Que sin base experiencial es una mera cáscara vacía, que no sirve para gran cosa.
Agradezco también el descoloque que me proporcionó Esther (mi compañera) que en gran medida ha motivado que empezara hoy el día escribiendo un poco sobre esto.
Una dificultad de estas sesiones será justamente la propia habilidad de los alumnos de dar sentido a sus experiencias de aprendizaje, a partir de mis comentarios, los comentarios de los compañeros y la integración con las diferentes lecturas que se vayan planteando. Ese dar sentido es individual (y colectivo también, pero individual finalmente). Y para ello hay que diferenciar ideas fundamentales, organizarlas, elaborarlas. Y las ideas están vivas, hay que cogerlas al vuelo, o se van. Por suerte, se suelen presentar más de una vez, muchas de estas ideas, son ideas repetitivas ,)
Un saludo
Alejandro
Hola, buenos días… soy Rocío Cárdaba Cornejo (de esta clase que presentas) (te comento en varias partes porque no me deja publicarlo en uno solo - HTML no es aceptable: Debe contener como máximo 4.096 caracteres-)
ResponderEliminarTe comento para resaltar algunos puntos que se me han hecho interesantes, como:
En primer lugar, en cuanto a los primeros párrafos sobre el marco temporal me ha llamado la atención el punto en sí como el uso de una historia, en este caso una anécdota de Richard Bandler, ya que como vimos en clase con la lectura de “Nunca, nunca, ofrezcas un consejo” en su cuarto enfoque para maximizar las oportunidades se cambio es la narración de una historia. Esto me ha llamado la atención por varios motivo: el primero es que esta me parece (por ello de que el receptor lo interpreta de una forma) que esta dirigida a aquellos profesores que se preguntarían “¿Cómo impartir todo el temario de esta asignatura en cinco sesiones?” (y digo yo… no será mejor centrarnos en lo que lo que se va hacer para que los alumnos aprendan, olvidándonos un poco de lo que no vamos a poder impartir?) y también está dirigida hacia ti mismo (ya que eres tu mismo el que está evaluando y reflexionado sobre tu práctica docente, la pasada, la actual y la futura… todo ello me crea la duda de: ¿podemos “aconsejarnos” nosotros mismos?.
Por otro lado, en cuanto al contenido de estos párrafos me gusta tu posicionamiento a la hora de decir “no me queda cuatro sesiones, si no 12 horas”… desde mi punto de vista me hace gracia que al aumentar el numero da la sensación de que tenemos más tiempo, aunque en definitiva sea el mismo (¿puede ser un autoengaño? Ja, ja). Pero por otro lado a leerte se transmite (o por lo menos a mi) positivismo y ganas de sacar el máximo partido a estas clases que nos quedan… y como he aprendido durante mi vida y como he podido escuchar repetidamente la actitud es fundamental, y en el caso de un profesor a la hora de afrontar sus clase y relacionarse con sus alumnos aun más, ya que está disposición hace que se cree un buen clima (tanto de convivencia como de enseñanza y aprendizaje).
En un segundo lugar también quiero destacar la pregunta que te hizo Esther: “¿cuándo o cómo trabajarías más conceptualmente en esta asignatura?”. Cuando empecé a leer los párrafos que hacen referencia a esta apartado lo primero que se me vino a al cabeza fue lo primero que pensé el primera día ¿Por qué Esther viene a estas clases? a lo que no se si acertadamente o no me autorespondo que por aprender o por “evaluar” tu práctica docente… ciertamente no creo que este del todo equivocada ya que te hizo una pregunta que ha hecho que reflexiones sobre ello.
EliminarEn cuanto al trabajo del concepto, tal y como lo explicas, esta claro que se pueden tener distintas nociones… desde mi punto de vista una no quita a la otra (pero se debería dejar claro y hacer una distinción entre ellas a la hora de trabajar para no encontrarte dificultades), me explico, como estudiante desde infantil hasta podría decir que este master (con algunas escasas excepciones en la carreras o en el master del año pasado) se ha entendido el concepto más como definiciones (como dices en tu entrada, de una forma más abstracta, y podría decir que más técnica) es decir, un concepto venía seguido de una definición, la cual te la enseñaban y la aprendes sin más… Por otro lado, ese concepto que propones ligado a las propias experiencias… para mí, es menos habitual y por ende todavía en ocasiones me parece más difícil (no que no pueda o imposible) estar en “sintonía” en la clase (como esa dificultad que expones en la ultima línea). Con todo ello quiero decir, y no sé si me estoy expresando de una forma entendible, es que como hemos dicho ya alguna vez en clase: cada uno tenemos una forma de entender el mundo de una forma distinta (en parte viene dado por nuestras experiencias) de ahí la importancia que veo trabajar el concepto desde tu perspectiva, pero en ocasiones creo que (bien por aclaración –distintas perspectivas- o costumbre) sería necesario dotar a ese concepto de una definición final aceptado por todos para que se pueda trabajar con el.
Por último mencionar de tu entrada, como de la sesión, el hecho de indagar o explorar con alguien… yendo más allá de lo que hicimos en clase y de lo que se hablo en la puesta en común como lo de “sacar información”… yo tuve la sensación de que a la vez que hacíamos los distintos ejercicios que además de indagar con la otra persona, como bien dices “con”, era que a su vez yo me iba conociendo un poco más a mi misma como por ejemplo mi forma de gestionar o desempeñar una determinada acción … eso me recordó a unas palabras de David Montalvo cuando me impartió “Tutoría y Orientación” que decía algo así: “Para orientar a alguien es necesario que te conozcas a ti primero, tus virtudes y defectos… porque sino ¿cómo vas a orientar a alguien perdido/desorientado si ni tu mismo te has encontrado/te conoces?.
Y esto es todo lo que más me ha llamado la atención cuando leía tu entrada y la conectaba con la sesión de clase, espero haber expresado las ideas clara, ya que no suelo (y tampoco soy muy fan) de escribir (en general, en expresar) lo que pienso (por costumbre y por personalidad).
Un saludo, Rocío.